Nos encontramos en la Plaza de la Vila, el centro neurálgico de Sant Celoni donde se celebran mercados, fiestas y actos de todo tipo.
Por su importancia, aquí se construyeron diversos edificios de interés histórico y arquitectónico de entre los que destaca la Casa de la Vila.
Se trata de un elegante edificio del modernismo tardío que fue edificado en 1926 por el arquitecto municipal Josep Domènech i Mansana que también llevó a cabo importantes reformas urbanísticas y la construcción de otros edificios municipales como la Térmica o el matadero.
El edificio del Ayuntamiento tiene una estructura escalonada de la cual sobresalen la torre central con reloj y campanario de hierro. El cuerpo central se sostiene en un sólido pórtico de arcos rebajados. De él destacan la decoración con ladrillos y los poderosos aleros de los tejados.
En la plaza encontramos algunas casas porticadas de tradición medieval, las “voltes”, que se edificaron entre los siglos XV y XVI para acoger el mercado semanal, documentado desde 1157.
El actual hotel Suís, situado delante del ayuntamiento, era la casa señorial de la familia Valls, gran propietaria forestal del término de Olzinelles. El edificio fue construido en el año 1886 y fue convertido en hotel en 1924.
A la derecha del ayuntamiento encontramos Can Ramis, una casa de los siglos XVII y XVIII que toma el nombre de la familia propietaria. La casa fue reformada en 1950 manteniendo buena parte de los elementos originales, como el portal con el escudo familiar. Otros elementos que se conservan actualmente, como la galería de arcos carpaneles del segundo piso, se añadieron recuperados de una casa de Barcelona.
Actualmente, el edificio forma parte del conjunto de equipamientos municipales que ofrecen un programa permanente de exposiciones temporales.
Por último, se puede destacar la escultura de Carlos Colomo que se dedicó al Ball de Gitanes con motivo de la 20ª bailada después de la recuperación de esta tradición popular.
El Ball de Gitanes, documentado de 1767, es un baile típico del Vallés y cabe destacar que en Sant Celoni tiene música, vestuario y baile propio. Se baila cada domingo de Carnaval en esta misma plaza.
Ahora continuaremos el recorrido bajando por la calle Mayor hasta llegar a la Plaza del Bestiar.